La zanahoria es una planta de la que se ingiere la raíz, pudiendo medir la planta hasta un metro de altura. Se trata de una de las hortalizas con mayor tradición medicinal como todos conocemos, especialmente beneficiosa a nivel ocular.
Se conoce con el nombre común de Zanahoria, Zanahorias, pero su nombre científico o latino es Daucus carota. Pertenece a la familia botánica de las Umbelíferas al igual que el apio y el hinojo.
La zanahoria es una especie originaria de Asia central y del Mediterráneo. Ha sido cultivada y consumida desde hace siglos por griegos y romanos. Durante los primeros años de su cultivo, las raíces de la zanahoria eran de color violáceo, siendo a partir de 1700, cuando se seleccionaron las variedades naranjas. Éste color se debe a la gran cantidad de caroteno que aporta.
Actualmente podemos encontrar zanahorias en cualquier época del año, especialmente entre agosto y diciembre, cuando serán de mayor calidad. La zanahoria prefiere los climas templados para su desarrollo, siendo su temperatura óptima de crecimiento unos 9 ºC y óptima de 16 a 18ºC. Además soporta heladas ligeras y sus raíces no se ven afectadas hasta -5ºC. Mientras que temperaturas superiores a los 28 ºC aceleran los procesos de envejecimiento de la zanahoria, provocando pérdida de color.
La zanahoria de calidades aquella que tiene la piel suave, de pequeño o medio tamaño, uniforme, de color naranja vivo, sin raicillas laterales. Si se compran con hojas, éstas deben ser frescas y de un verde brillante.
La mejor forma de almacenar las zanahorias es con hojas cortadas para que no disminuya el valor nutritivo de la raíz. Se conservarán en refrigeración en envase de plástico perforado, pudiendo llegar a durar incluso un par de meses (siempre que partamos de una zanahoria de calidad).
La zanahoria es una hortaliza con un valor energético relativamente bajo, que supone aproximadamente 45 kcal/100g. Tiene un contenido en hidratos de carbono bastante destacable, pudiendo llegar al 8%, mientras que apenas contiene grasas (0,2%) y proteínas (1%).
Minerales: de su contenido mineral destacaremos el potasio por ser el que se encuentra en mayor proporción, aunque la zanahoria no es una de las hortalizas con mayor contenido en potasio. Pero además podemos citar otros minerales que se encuentran en cantidades importantes, casi tanto como el potasio, y que son vitales para el correcto funcionamiento del organismo: magnesio, hierro, calcio y fósforo, y en menor proporción el sodio y cinc.
Vitaminas: en cuanto al aporte de vitaminas, haremos especial hincapié en la importante cantidad de vitamina A (en su forma de provitamina o caroteno) que contienen las zanahorias, siendo éstas las hortalizas que mayor contenido en vitamina A presentan. Por otro lado también encontramos cantidades destacables de vitaminas B1, B2, niacina, B6 y folatos, y vitamina E y C.
La zanahoria es un alimento con una larga tradición de planta medicinal. Son diferentes los efectos beneficiosos que se atribuyen a esta hortaliza, entre los que podemos destacar:
La zanahoria es uno de los alimentos más utilizados desde hace siglos, tanto por sus propiedades nutritivas como por los efectos beneficiosos con los que se la relaciona. Es el alimento con un mayor aporte de vitamina A, por lo que será especialmente beneficioso a nivel ocular.