La judía verde, perfecta para platos calientes, y también fríos

Las judías verdes, imprescindibles a día de hoy, son hortalizas presentes en la dieta de todo individuo. De la planta se consume el fruto inmaduro.

Denominación

Se conoce con el nombre común de Judías verdes, Judía verde, Habichuelas verdes, Judías de enrame, Frijol, Poroto, pero su nombre científico o latino es Phaseolus vulgaris var. vulgaris. Pertenece a la familia de las Leguminosas, entre las que también se encuentran el guisante y el haba.

Origen

La judía es una especie de origen americano, puesto de manifiesto, tanto por diversos hallazgos arqueológicos como por evidencias botánicas e históricas. Los indicios más antiguos de cultivo datan del año 5000 a.C. La introducción en España y posteriormente su difusión al resto de Europa tuvo lugar en las expediciones de comienzos del siglo XVI.

 

Variedades

  • Judía Garrafal enana: sección plana, ciclo medio y porte bajo.
  • Judía Jumbo: sección redondeada, sin hebras, grano verde claro, tamaño pequeño y ciclo medio.
  • Judía Kora: vainas ligeramente curvadas, sin hebras y grano verde claro.
  • Judía Mocha: vainas rectas, granos elípticos.
  • Judía Bobby: verdes, alargadas, redondas y grano violeta.
  • Judía Rasta: valencianas, verde, alargadas y granos en forma de riñón.
  • Judía Herradura: vainas curvadas.
  • Judía Buenos Aires: vaina con sección aplanada.
  • Judía Garrafal Oro: sección aplanada y hoz muy marcada.
  • Judía Perfection: sección tubular, granos aplastados.

 

¿Qué aspecto tiene?

  • Color: por lo general se trata de variedades de color verde más o menos intenso, aunque podemos encontrar tonalidades amarilla o jaspeado de marrón o rojo sobre verde.
  • Forma: la forma de la judía depende de la variedad a la que hagamos referencia, aunque por lo general serán variedades alargadas.
  • Tamaño: miden de largo aproximadamente unos 10- 20 cm dependiendo de la variedad de judía verde.
  • Peso: tienen un peso aproximado de unos 10g, dependiendo de la variedad y el estado de desarrollo.
  • Sabor: tienen un sabor suave que en ocasiones puede parecer algo dulce.

 

Modo de preparación y empleo

  • En conserva: es una forma de ingerir las judías verdes cuyo consumo va aumentando de forma considerable.
  • Cocinado: lo mejor es cocinar las judías al valor, de forma que guarden la mayor parte de sus propiedades nutritivas.

¿Cuándo lo encontramos y en qué condiciones?

Las judías verdes son hortalizas de clima húmedo y suave, dando mejores resultados en climas cálidos. Se trata de hortalizas que podemos encontrar todo el año, ya que suelen cultivarse en invernadero, aunque siempre encontraremos más y de mayor calidad en primavera y verano.

El mejor ejemplar y su conservación

Para escoger buenos ejemplares de judías verdes debemos fijarnos en que tengan un color vivo y brillante, sin decoloraciones anormales. Además deben tener una forma regular y no ser muy duras al tacto.

Una vez que tengamos las judías en casa, lo mejor es meter las judías verdes en un envase de plástico perforado y mantenerlas en la parte menos fría del frigorífico. De esta forma, conservan todas sus cualidades durante un periodo de tiempo que oscila entre los cinco y diez días.

Características nutritivas

Las judías verdes son hortalizas con un valor energético escaso que apenas pueden llegar a aportar hasta 28 kcal/100g. Al igual que la gran mayoría de las hortalizas su contenido en agua es muy importante, pudiendo llegar al90% de su peso. Su contenido en hidratos de carbono es considerable (5%), siendo muy destacable su contenido en fibra (2,4%). Contiene cierta cantidad de proteínas 2,3% y cantidades casi inapreciables de grasa.

Minerales: es de destacar el elevado contenido en potasio, siendo éste el que se encuentra en mayor proporción en las judías verdes. Pero además podemos citar otros minerales que se encuentran en cantidades muy importantes, casi tanto como el potasio: magnesio, hierro, yodo y fósforo.

Vitaminas: en cuanto al aporte de vitaminas, las judías verdes contienen cantidades importantes de en vitamina C, folatos y vitamina A. Y además de las anteriores contiene vitaminas B1, B2, niacina y B6.

¿En qué puede ayudarnos?

Las judías verdes forman parte de nuestra alimentación desde hace siglos, aunque más por sus cualidades nutritivas que medicinales. Aun así, podemos destacar algunas propiedades beneficiosas para la salud que actualmente se le atribuyen:

  • Diurético: las judías verdes presentan un marcado efecto diurético y depurativo. Favorecen la eliminación de líquidos sobrantes del organismo y sustancias de desecho. Ello se debe a que en su composición encontramos cantidades importantes de potasio y agua, además de muy poco sodio.
  • Embarazo e infancia: debido a su contenido en folatos, las judías verdes no pueden faltar en la dieta de las mujeres embarazadas y los niños.
  • Obesidad: las judías verdes son un alimento idóneo para incluir en las dietas de adelgazamiento, ya que contienen cantidades elevadas de fibra, y apenas aportan energía y grasas.

¿Y qué más?

Las judías verdes no deben consumirse en crudo, ya que contienen una sustancia que puede tener cierta toxicidad. Esta sustancia se pierde al cocinar las judías, por lo que mientras no se consuman en crudo no habrá ningún problema.

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